Sin lugar a dudas, pasar más tiempo en casa nos ha dejado un tiempo muy valioso para conocernos mejor y desarrollar nuevas habilidades.
Pero… ¿cuáles son las cosas que hemos aprendido? A continuación, vamos a contarte algunas de ellas:
Aprendizaje del COVID-19
- Que nuestra casa ha sido testigo de un centenar de historias bonitas. Eso sí, el contexto actual ha hecho que cambiemos nuestras prioridades a la hora de escoger una vivienda y ahora sabemos que disfrutar de una terraza o balcón es un privilegio al que no queremos renunciar. Si te interesa este tema, puedes leer nuestro post sobre la vivienda del futuro.
- Que todos llevamos un pequeño chef dentro. Desde que comenzó el confinamiento nos hemos atrevido con muchas recetas nuevas. Las llamadas a nuestros padres y abuelos para averiguar los secretos de sus platos se han repetido a diario en nuestras cocinas.
- Que podemos convivir con nosotros mismos y disfrutar de la situación. Muchas personas han pasado este confinamiento de manera individual. Meses atrás no lo hubiéramos creído, pero somos absolutamente capaces de estar tiempo solos.
- Que las videollamadas nunca nos habían dado tanto. Ver a nuestros amigos y familiares a través de la pantalla nos ha dejado momentos inolvidables y el cariño ha logrado traspasar cualquier barrera.
- Que tenemos unos vecinos con vidas muy interesantes. Salir a nuestros balcones a aplaudir nos ha brindado la posibilidad de poner nombre y cara a todas esas ventanas que veíamos desde el sofá.
- Que el teletrabajo es posible, nos gusta y contribuye a que nuestro planeta sea mejor. Si hace meses pensábamos que trabajar en remoto era una leyenda, ahora sabemos que somos capaces de organizar nuestra jornada y seguir dando lo mejor de nosotros mismos sin pasar por la oficina.
- Que a veces hemos estado tan ocupados que no hemos prestado a nuestra familia la atención que merecen. Por suerte, hemos reordenado nuestras prioridades y aumentado el tiempo que les dedicamos.
- Que vivir más despacio y con lo necesario no era ninguna idea del otro mundo. Ser capaces de bajar el ritmo y comprar solamente lo imprescindible ha sido, indudablemente, uno de los aprendizajes más sorprendentes.
- Que la conciliación tiene que dejar de ser un mito para convertirse en una realidad. Jornadas flexibles, teletrabajo y cualquier propuesta es imprescindible para compaginar nuestra vida laboral y personal.
- Y la última, y no por ello menos importante, que ahora estamos seguros de que podemos superar todas las adversidades si permanecemos unidos y remamos en la misma dirección.
Déjanos tu comentario y cuéntanos para qué te ha servido todo este tiempo de confinamiento. ¡Seguro que leemos grandes historias!